Gran fin de semana de pelota en el que la División de Honor finiquitó su liga con la disputa de las finales por el campeonato, donde Puertas Bamar revalidó su título de herramienta y Urbión “destronó” al hasta ahora campeón Oberena, en una jornada sin excesivo brillo y donde la emoción apareció con cuentagotas.
De igual modo asistimos a otro final en Primera División, el de la Liga Regular, que ha dispuesto los equipos que se jugarán el ascenso y quienes no han podido evitar la pérdida de categoría.
Aquí, al igual que en División de Honor, no hubo mucho margen para las sorpresas y todo discurrió por el cauce “marcado”.
División de Honor.
Comenzaba la velada con la modalidad de herramienta y con un duelo en la cumbre: una pelea con tintes de revancha que enfrentaba a los mismos contendientes que disputaron esa misma final el pasado año y donde Puertas Bamar se hizo con la victoria a costa del Club Natación Barcelona.
El duelo comenzaba con la paleta cuero como arma, una especialidad en la que los catalanes partían con cierta ventaja tras haber concluido la liga con tan sólo una derrota.
Pero ayer la dupla barcelonesa no fue la dupla barcelonesa. Agustí Brugués no tuvo su día y no pudo ayudar como hubiera querido a un Jhoan Torreblanca que se vio superado ante la seriedad y el juego compacto de Ander Landeta y Álvaro Medina, que volvieron a dar una lección de cómo se juega a paleta.
Además, los jugadores catalanes “solamente” hicieron 17 tantos con lo que las ya de por sí elevadas probabilidades de victoria de la escuadra iscariense aumentaron de forma exponencial pues, para hacerse con el título Carlos Baeza e Imanol Ibáñez “tan sólo” tenían que sumar 18 puntos en el encuentro de pala corta, hecho que, habida cuenta de la calidad de estos jugadores, era muy posible.
De todas formas los defensores del gallardete catalán, Rubén Ayarra y Emiliano Skufca, saltaron a la cancha de la Agrupación Deportiva San Juan, como si en ese partido se estuvieran jugando la propia existencia, prescindiendo de los números que les eran esquivos y dedicándose a “buscar las cosquillas” a la fenomenal pareja que tenían enfrente.
Así se llevaron el primer juego por 15 a 13, haciendo las delicias del público que pobló las gradas y soñaba con un partido largo para seguir disfrutando de la colección de golpes con que se estaban “obsequiando” los cuatro protagonistas.
Una vez que los catalanes alcanzaron los 18 tantos que les daban de nuevo el triunfo en el campeonato, la cosa se relajó por la nula importancia del marcador y el partido cambió absolutamente, pues se impuso la competitividad de cuatro jugadores a los que no les vale una cosa más que la victoria.
El 14 a 14 no hizo sino “azuzar” más la caldera que alcanzó el tope en su ebullición con el tanto de Puertas Bamar que enviaba el partido al desempate ante el delirio de un graderío entregado.
El tercer y definitivo juego fue propiedad de los “nadadores”, que se lanzaron a por la victoria provocando los errores de un Baeza desconocido y de un Imanol Ibáñez que no anduvo por sus fueros en ningún momento del partido.
Victoria sin premio material para Ayarra y Skufca, pero que dejó en estos grandes jugadores una alegría inmensa: la que se consigue al querer ganar sólo por el hecho de hacerlo y dejarlo todo sobre la cancha para alcanzarlo.
Por lo que respecta a la competencia de mano, sorpresa en el frontón de la Agrupación Deportiva San Juan que vio como el CD Urbión “despojaba” del podio al campeón en curso, el CD Oberena.
Una “sorpresa” relativa porque la superioridad de los sorianos en el mano a mano contrastaba con la preeminencia de los navarros en la pugna por parejas, con lo que parecía que el número de tantos obtenidos podría ser de importancia “capital”.
Y así fue, pues Beñat Senar “desarboló” a Iosu Igoa, al que únicamente dejó apuntarse cinco tantos, poniendo en bandeja de plata el triunfo a sus compañeros Bañat Azketa y Aratz Oliden, que con seis tantos y podrían entonaran el “alirón”.
Toda la presión estaba en el lado de Oian Canabal y Joseba Aldave, quienes comenzaron a carburar un pelín tarde, superados por los dos “guipuzcoano – sorianos”, que pusieron en cada tanto todo lo que contaba aquella vieja canción de Adrián Flores Albán, inmortalizada por “Los Panchos”: Alma, corazón y vida.
El 10 a 9 con el que acabó el primer juego, es prueba de ello.
Con el título ya en poder de Urbón se serenaron los ánimos y Oberena comenzó a ser el de siempre, dominando el punto con un Joseba Aldave gozando de la pelota y facilitando el remate de Oian Canabal.
Primera División
En la segunda categoría de la pelota nacional se cumplió a rajatabla aquel dicho de que “la risa va por barrios”, pues llenó de gozo el “barrio” riojano y cargó de amargura el “arrabal” andaluz, en una nefasta jornada para pitonisas y videntes, pues el margen para la sorpresa era más estrecho que el pasillo de un submarino.
En el Grupo A de Herramienta apacible fin de semana para sus integrantes que ya conocían de antemano el descenso del Benahadux y las clasificaciones de La Coruña y San Juan.
Algo más que disputar había en el Grupo B, quedando para la última fecha el saber quién acompañará a Adurtza a la fase definitiva y quien caería al “pozo” del descenso.
A la primera cuestión respondió el enfrentamiento directo entre Lagun Artea y San Cosme en el feudo logroñés, donde los vizcaínos, a quienes les bastaba tan sólo un punto, se hicieron con los dos para certificar el pase.
Y en el lado luctuoso, Almería no pudo “enjuagar” la ventaja que le separaba de Vallelado y finalizó en la última posición completando la debacle de los clubes almerienses en esta temporada.
Completamos la crónica con la mano y comenzamos con el “diáfano” Grupo A, en el que San Cosme Promesas y Pradejón estarán en semifinales y el Paladín salmantino jugará el año que viene en Segunda División.
Y en el caso del Grupo B, Barberito I, no dio pie a la sorpresa y “vapuleó” al descendido San Miguel; mientras que Ezcaray alcanzó el punto que le faltaba en detrimento del Txukun Lakua para refrendar el “póker” riojano en la Fase Final de mano, con lo que el año que viene el hueco dejado por Najerino en la División de Honor, será ocupado por otro conjunto de la tierra.
Ya sólo quedan dos fascículos en esta competición, la Fase de Ascenso a División de Honor y la atractiva Copa del Rey, que tendrá lugar el viernes, sábado y domingo próximos en el “sagrado templo pelotazale” del Frontón Adarraga logroñés.
