Poco a poco se van cumpliendo las postreras etapas de la liga regular y varios de los clubes del campeonato ya han hecho sus deberes y tendrán un final de torneo plácido, en contraste con los otros que, como el mal estudiante, dejan todo para el último momento.
Esta pelea es la que va a dotar al término del campeonato de una gran emoción para ver quién alcanza la gloria de la clasificación y logra eludir el infierno del descenso.
División de Honor
En la modalidad de herramienta, la jornada del fin de semana ha dejado claro que Puertas Bamar es el conjunto más en forma de la competición y está decidido a intentar revalidar el triunfo en el campeonato.
Su triunfo (otra vez moviendo de sitio sus peones) ante el Errepala y algunos resultados en los otros duelos le colocan como líder en solitario y con muchas posibilidades de acabar así.
Tras su “tremendo” inicio de liga en el que tuvo que lidiar semana sí y semana también con los “toros” más bravos de la ganadería, la escuadra iscariense va a tener un final de liga algo más “placido” donde, salvo sorpresa mayúscula, seguirá dominando la tabla para meterse en la pelea por el triunfo.
Por debajo, Tenis Pamplona, Oberena y Natación Barcelona parecen ser los mejor colocados para acompañar a los vallisoletanos en la Fase Final. Los dos primeros, protagonistas del choque disputado en el Frontón Labrit, dividieron victorias y se mantienen en la pelea, pues la derrota de uno de ellos le hubiera dejado un tanto descolgado.
Como algo descolgado ha quedado el Amaya tras su incontestable derrota en feudo del Club Natación Barcelona, un equipo catalán que va en progresión ascendente y también tiene muchas papeletas para reeditar la final del pasado año.
Por abajo cuatro equipos están en la lucha por “huir de la quema”, aunque son dos los que más “crudo” lo tienen. Lagun Artea con una victoria y El Olivar, todavía a cero en su cuenta de triunfos, van a tener que ganar prácticamente todo lo que les queda para intentar superar a Errepala y Larraina que, con cuatro y cinco victorias, respectivamente, son los “enemigos” más cercanos para dejar el descenso atrás.
El calendario no les va a ayudar mucho en este afán, pero a buen seguro que zaragozanos y vizcaínos se dejarán la piel sobre la cancha por intentar lograrlo.
En el lado de la mano, circunstancias muy parecidas, con tres clubes en la “pole position” de la carrera por meterse en la Fase Final. Irurtzun, Urbión y Oberena se van a jugar en las tres últimas jornadas sus posibilidades, con partidos entre ellos que, a buen seguro, dictarán sentencia.
Por si todo este augurio falla, al “rechace” se encuentran San Atilano y un Zugarralde que ha ido perdiendo fuelle en las últimas jornadas.
En la “zona caliente”, la victoria de Najerino en el partido individual ante Oberena amplía la esperanza de los riojanos por mantener la categoría que saldrá de la pelea que van a mantener con Buruzgain y San Cristóbal, lcon Huarte y San Cosme bastante más alejados del peligro.
A nadie escapa que burgaleses, najerinos y navarros se van a jugar en las tres últimas jornadas la permanencia en la máxima categoría de la pelota estatal en tres partidos donde cada punto será vital.
Primera División
Comenzando por la disciplina de herramienta, esta temporada la pugna en esta categoría está siendo muy igualada y abierta y con todavía cuatro jornadas por disputar, es muy arriesgado aventurar un pronóstico pues todo podría pasar.
En el Grupo A, San Juan vio desde casa como el empate de Artepe y Armintza y la indiscutible victoria de La Coruña ante Benahadux, deja un panorama en el que navarros y gallegos cogen algo de ventaja para finalizar en los puestos de play off, aunque no deben dormirse en los laureles pues sus perseguidores también tienen posibilidades en un grupo en el que semana a semana se irá aclarando la situación.
Y si en este grupo las cosas todavía no están claras, qué decir del Grupo B, que se ha convertido en el más emocionante de toda la competición, en el que los cuatro primeros colocados están en una “horquilla” de tan sólo una victoria y el último de la lista tan sólo se aleja dos.
Con todo ello nos esperan grandes jornadas y enormes duelos pues, ni todo está ganado para unos, ni todo está perdido para los otros.
Quienes sí tienen mucho perdido, y hablamos ya de mano, son Paladín y San Miguel en sus respectivos grupos. Salmantinos y navarros no levantan cabeza y cuentan todos sus partidos por derrotas. Tiempo tienen para enderezar el rumbo, pero deben empezar ya a ganar pues si no lo hacen se les va a escapar el tren de la permanencia.
Por la parte de arriba, en el Grupo A, funciona la “conexión riojana” pues Pradejón, que cedió su primer partido esta jornada, y San Cosme Promesas dominan la clasificación con cierta ventaja y son los favoritos para entrar en la pelea por el ascenso. De todas formas no deben “dormirse en los laureles” pues Larraun, fortalecido por haber infringido su primera derrota al Pradejón, todavía tiene espacio para ponerles en un aprieto.
En el Grupo B, por su parte Barberito I y Lagun Artea, que vencieron con solvencia en esta jornada, se erigen como los señalados para optar a la Fase de Ascenso. Eso con el “permiso” de Ezcaray y Txukun Lakua, que todavía tendrían algo que decir.
Segunda División
En el Grupo A de herramienta, esta liga está siendo un “camino triunfal” para San Cosme B, que es el único equipo invicto en las tres divisiones en esta modalidad y ya tiene reservada su plaza en la Fase de Ascenso, al igual que su homónimo del otro grupo, el novel Universidad de Navarra.
Otro cantar son las otras dos plazas por cubrir, donde la última jornada, en ambos grupos, será decisiva en un cara o cruz espectacular.
Y toda esta emoción igualmente se traspasa a la mano, donde la última jornada también va a ser crucial, salvo en el Grupo A, donde el Izarra de Portugalete ya hizo aquellos deberes de los que hablamos al principio y aguarda en su jornada de descanso que llegue la lucha por el ascenso. Los otros tres equipos que le acompañarán saldrán de una postrimera jornada en el que se volverá a escuchar aquello de… “sólo puede quedar uno…”
