- Gran fin de semana para la escuadra vizcaína, que se llevó el triunfo tanto en la pugna masculina, como en la femenina
Domingo lluvioso en Markina en el día en que el Campeonato de España de Clubes de Cesta Punta en Frontón de 36 metros iba a conocer a sus campeones de la presente temporada amparados por el incomparable escenario de la Universidad de la Pelota.
Los primeros en entrar en liza fueron los clubes protagonistas de la final femenina que se metieron en la final tras dos últimas jornadas de infarto en la que Markina, imbatida hasta el momento, vio como Berriatua y Danok Bak le destronaban de la final, en el caso de esta última escuadra por la exigua diferencia de un tanto.
Así las cosas Berriatua y Danok Bat saltaron a la cancha para disputar un choque en el que la previa nos señalaba una lucha muy igualada, habida cuenta de la gran calidad de sus cuatro actrices principales: Ihart Arakistain Muñoz y Maialen Aldazabal Aldazabal representando al primero y Maite Ortiz de Mendívil Beltrán de Heredia y Eneritz Lizardi Azpiazu, portando la enseña del conjunto de Motrico.
Y el primer juego obedeció a esta premisa, con mínimas ventajas en favor de ambos duetos, Así hasta que, llegando al último tramo del juego, Maite y Eneritz se mostraron más acertadas y completaron un parcial que les colocó a un tanto de hacerse con el primer envite (11/14).
Pero las de Berriatua no se amilanaron y, con una Ihart Arakistain concentradísima, fueron enjuagando la distancia hasta darle la vuelta al tanteador, empatando a 14 tantos y culminando la remontada para llevarse el primer juego ante la atónita mirada de sus rivales que no daban crédito a lo que estaba sucediendo sobre el coso markinarra.
En el segundo desafío, las mutrikuarras salieron decididas a buscar la victoria para forzar el desempate, pero se toparon con una pareja rival muy sólida que logró en gran medida anular el juego de Ortiz de Mendívil, que se revolvía en los cuadros alegres al no gozar de pelota para rematar.
Esto, unido a que la dura derrota en el primer juego hizo mella en las guipuzcoanas, llevó en volandas a las de Berriatua hacia la victoria en el segundo juego lo que les daba el campeonato, reeditando el triunfo logrado en la edición del pasado año disputada en el Frontón Aitzuri de Zumaia.
Alberdi y Lekue consuman el doblete
Tras le pelea de categoría femenina llegó la final de los chicos, en la que Berriatua, verdugo en la víspera de Zumaiako en un partido en el que los hermanos Aguirre cometieron más errores de lo normal, se iba a medir al Gasteiz vitoriano, que volvió a dejar sin premio al conjunto anfitrión, en un duelo donde Julen Del Río Díez estuvo de “diez”; no sólo en el dominio del juego, sino también ayudando, dirigiendo y animando a su compañero, Aarón González De Matauco Hernaez, que estuvo fantástico en los cuadros alegres.
Con estos antecedentes se esperaba un choque tremendamente disputado en el que lograr un tanto solamente llegaría tras una lucha sin cuartel.
Pero “ni hablar del peluquín”. En el primer juego Antxon Alberdi Barrutia y Roberto Lekue Echaburu, muy seguros durante todo el partido, se vieron sorprendidos por los excesivos fallos de un Julen Del Río que jugó más con el revés, en detrimento de su demoledor golpe de derecha.
Así, los de Berriatua se llevaron la primera manga en un juego gris, sin ritmo, donde los errores se impusieron a los aciertos y Del Río no fue Julen.
En la reanudación, el público “universitario”, esperaba la reacción de los vitorianos para disfrutar del espectáculo que se les había negado en la primera entrega de la final. Y durante algunos tantos así fue, Aaron y Julen salieron decididos a plantar batalla y firmaron tantos de gran calidad para buscar minar la tremenda consistencia de la dupla rival, Antxon y Roberto, que no estaban por la labor, continuaron con su táctica, aguantando y devolviendo todo los “regalos” con que les “obsequiaban” sus contrincantes.
Esta resistencia vizcaína hizo mella en Aaron González de Matáuco que, deseoso de sumar tantos forzar el desempate, comenzó a cometer errores que fueron engrosando el marcador de los de Berriatua quienes, con un Alberdi estelar, volvieron a imponerse en el segundo juego para hacerse con el torneo con todo merecimiento.
La Universidad de Markina es un centro muy exigente y no aprueba a cualquiera, pero este fin de semana tuvo que otorgar su máxima a los alumnos y alumnas de Berriatua que vinieron a este importantísimo examen con la lección bien aprendida.
